¿Me puedo fiar del protocolo?

Estamos comenzando la Semana Mundial del Parto Respetado. Este año el lema es ‘Menos Intervenciones y Más Cuidados’. Tengo que reconocer que el lema de este año me encanta, aunque sigo pensando que el respeto tiene varias caras y que no solo consiste en tratar de seguir las guías… ya que en la experiencia de gestar, parir y lactar hay una individualidad de cada persona, que yo siento que hay que tener en cuenta y que quizá, no siempre, lo que dicen las guías o la evidencia es lo mejor para esa persona.  

Ya sabéis que, aunque las matronas de Mujeres Sabias somos conocidas por dedicarnos al parto natural naturalísimo, yo soy una gran defensora de las cesáreas o partos programados si la mujer así lo desea o de la epidural, cuando no hay indicación médica pero es el deseo de la mujer.

Otra cosa, es que en mi labor como matrona, mi deber sea ofrecer y divulgar información basada en la evidencia para que las mujeres puedan, con ella, decidir. Ya que en muchas ocasiones hay mujeres que toman decisiones que les implican más riesgo para ellas y sobre todo para sus bebés, debido a una mala información (entendamos mala información como la información no basada en la evidencia científica más actual). Y esto, por supuesto, sin tratar de persuadir ni convencer, solo informando.

  A lo que iba… muchas me escribís preguntándome que ¿Cómo saber si lo que te proponen los profesionales de la salud es respetuoso? y… ¿hay que seguir lo que el protocolo marca sí o sí?   Pues depende, (guau sí, acabo de descubriros la luna, lo sé). No, ahora en serio, DEPENDE.

• Los protocolos, en principio, son guías para nuestra actuación como profesionales, que están basadas en la evidencia, con las que podemos saber qué conviene hacer en determinados casos. Pero son medidas estadísticas que miden el riesgo poblacional. Es decir, dicen a nivel general a partir de qué dato (hora, tratamiento, dato analítico…) hay más riesgo, o mejores resultados… o lo que sea que están observando. 

Sí, de un centro a otro muchas veces varían los protocolos, y es por esa manera de hacerlos, porque son medidas poblacionales y en cada centro se suelen adaptar a su propia idiosincrasia. Tenéis que tener en cuenta que en general pocos estudios hay que digan que a partir de ese dato (esas horas de bolsa rota, esa cantidad de fármaco administrado…) entras en un mega peligro. Para que lo entendáis, es como cuando te tienes que repetir la prueba del azúcar porque te ha salido a 141 y no te la tienes que repetir cuando te sale 139, el riesgo de tener diabetes gestacional pues es bastante parecida, pero en algún punto hay que poner el corte.

• También hay que tener en cuenta que desde que se redactan los protocolos hasta el momento actual puede haber evidencia nueva. Sí, esto es una realidad y entonces debería de tenerse en cuenta estos nuevos resultados.
• Y como al principio os contaba, sí, en cada persona hay una variabilidad, unas circunstancias, de salud, familiares, laborales, emocionales, una historia vital particular que se debe tener en cuenta y que debería de hacer que el protocolo se adaptara a la persona y no la persona al protocolo. 

Volviendo al ejemplo de la diabetes gestacional, con 139 igual si tooooda tu familia tiene diabetes gestacional en el embarazo, si tus familiares conforme se hacen mayores tienen diabetes, pues igual te conviene repetirla, aunque no hayas superado el límite.

Entonces… ¿Te puedes fiar? Pues en principio sí, pero como siempre, si dentro de ti tienes una voz que te dice (o te chilla) que eso no es para ti, yo te animo a que lo comentes con el profesional que te va a atender y que entre los dos podáis ver cómo adaptarlo mejor a tu caso. Sobre todo porque lo que dicen los protocolos son medidas poblacionales, medidas que a nivel global pueden tener un sentido, pero que no tienen por qué ser rígidas (porque de hecho pocos suelen serlo, y por eso en tantas ocasiones hay diferencias entre unos hospitales y otros), ni tiene por qué ser totalmente válido para tu caso particular, ya que se basan en estudios y tu caso puede no ser calcado al que se estudiaba en esa investigación. 

Sí, cuando vas a un profesional sanitario a solicitar asistencia, en principio no deberías de tener que hacerte un master en obstetricia previamente, ya que se presupone que el profesional va a estar actualizado y que va a seguir esas guías de buena praxis en su versión más actual. Pero sabemos que no siempre es así y que en muchas ocasiones os veis en la necesidad de buscar información para confirmar.  

¿Dónde buscar información de calidad y oficial? Pues googleando NO.

Se puede encontrar buena información con ese método, pero también otra muy muy desactualizada y sin mucha base científica. Aquí os voy a dejar unas bases de datos y algunas páginas donde la información que puedes encontrar es válida, con lo que te puede ayudar a validar la información que te puedan ofrecer los profesionales.

• http://www.msssi.gob.es/organizacion/sns/planCalidadSNS/e02_t04.htm
• http://www.who.int/topics/maternal_health/es/
• https://sego.es/Area_de_la_Mujer
• https://www.nice.org.uk/guidance/conditions-and-diseases/fertility–pregnancy-and-childbirth
• https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/
• http://es.cochrane.org/es
• http://www.bibliotecacochrane.com/BCPMain.asp

  Espero que os sirvan estos recursos para poder confiar en los equipos que os acompañen, ya que para parir es importantísimo confiar, para no estar durante el parto en estado de alerta (en el que se segrega adrenalina y no oxitocina), para poder cerrar los ojos y dejaros llevar solo y exclusivamente por vuestro bebé. Sabiendo que lo que va a suceder fuera está ‘controlado’, es decir, que nadie va a hacer nada que tú no desees y al contrario, sí, van a saber lo que necesitas y lo van a llevar a cabo tal y como deseas.   Y aprovecho para recordaros que un gran recurso del que se dispone a la hora de parir es la realización del plan de parto, donde puedes expresar tus deseos y necesidades para que el equipo sanitario sea conocedor y pueda tenerlo en cuenta.   Un abrazo, Gemma